Pronostico del tiempo.

La verdad, esta escondida en una montaña lejana, donde solo los valientes pueden subir. Los amantes se quedan mirando y esperando, pero los que llevan el corazón de fuego caminan entre las tinieblas sin miedo, con el escudo del amor y la lanza del desapego. El ego escondido en tus entrañas sirve para calentar la sangre y poder dominar los tenebrosos pantanos de la incertidumbre, antes de que te quedes sola , estaré observandote sin que te des cuenta, seré una sombra en tu pared.

El cielo rojo , nos muestra sus pestañas y deja salir las primeras lágrimas de culpa y sinceridad, recién los amantes se tornan al sol y se vuelven gigantes, con la mordaza en la mano, logran surcar místicas ruinas que quedaron de un corazón inmenso, el centro del universo.

La profecía esta dicha, las cartas hechadas en la mesa y solo quedo yo con la naturaleza, dos únicos en el núcleo del fuego, danzando y profanando tumbas mundanas y tan terrestres, que solo queda mofarse y hacerse de la vista corta.

No es buen enemigo un perdigón, salvo que la velocidad sea su aliada y la distancia su compañera. La muerte me espera, siempre que escribo , me lee desde atrás, y puedo sentir su aliento helado, sus temblores y sus pasos pausados; lo siento cenicienta del mal, esta noche tampoco me tendrás.