digitos

jueves, 18 de noviembre de 2010

Otoño sin final.


Duerme en mis brazos, estirate y bosteza,

ten la seguridad de mi ser en tu ser, mi piel es tu piel,

quiero ver a través de tus ojos, luz de luna en medio del mar.


Guardo una promesa eterna, enterrada en la isla de tu vanidad,

cada mañana es una esperanza para seguir nadando hacia ti,

perdido entre tus piernas , solo soy un desterrado en el amor.


Llego a ver en el fondo del océano las escamas de sirena,

son los ritmos de tus intentos por seguirme , y yo no quiero huir,

pero me alejan los vientos que traen consigo días de primavera.


El otoño acabo con una raíz seca en mis manos,

así termino la caricia larga y perturbadora de tus dedos en mi espalda,

la espina que dejaste hundida en la cutícula del placer,

ángel sin piel, alada mujer que sueña que es niña otra vez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario