Amada de los siete conjuros, artemisa y curandera. Mujer que soporta las más fuertes dolencias. Ensayada del sexo y del amor. Soportaste un tormento que tare luz de vez en mes, pero no fue justo. Quien quiere dar más de lo que recibí. Nadie debía cortar tus alas, tus ganas de comerte el mundo con una sonrisa e in corazón rasgado. Siempre latirás dentro de mí, pero las cosas terminan cuando tú empiezas a correr y yo te quiero retener a mi lado. Error del tiempo. ¿Y si el amor es tan grande? ¿Donde estas?
Ojos, perdidos en el viento. Loca que mata dragones con besos de miel y sabor a menta. Tu quizás sin querer jugaste con mi corazón como un trompo, le diste más vueltas de las que soportaba, y él era feliz. Tus lágrimas eran continuas, pero no las provoque yo, y tú lo sabes. Nos quisimos tanto y fuimos felices en tan poco tiempo. Ahora que estoy más tranquilo porque sé que estas mejor. Te extraño más. Pero no es culpa de nadie, espíritu libre de naturaleza infiel.
Tú, no sabes aun quien eres. Ya no quiero verte tan triste, me duele mucho. Ahora que lo que siento es tan absurdo como lo que se de ti. Debo aprender a olvidar mi idea de dejar que las cosas fluyan solas, pero ¿sabes? no es justo lo que pasa en tu corazón. Puedo sentir tu dolor a metros de ti, y cuando te veo se que sabes que tampoco eres inocente de tu situación. Enredos que nos enseñan a vivir. De todas las personas del mundo, la casualidad me llevo a tu ventana, un vidrio roto y sucio, llenos de conflictos y marcas de años de felicidad. Mis pasos se alejan con velocidad, no puedo seguirte princesa. Nos dañamos los dos.
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