compañia

S O L O,
soy un duende escondido en el lado oscuro de la luna,
sin amor, sin dolor, sin sentidos en la piel,
aprendí el dialecto de las raíces, el elemento universal del grito,
la sabiduría eterna de las almas mudas que deambulan los pasadizos.

Me dejas S O L O,
y esa es la triste historia que marcaria mi destino por siempre,
la felicidad son gotas de una ducha oxidada que mojan las pecas de mi espalda,
pero si no estás tú para humedecer tus labios en mi boca,
muero como el sol en invierno, como la frágil estrella que desaparece cuando amanece.

Me queda S O L O tus reclamos,
no digo nada romántico, me pongo de un humor extraño,
yo te quiero más de lo que imaginas, pero no sé si eres la verdad de mi,
o si yo soy lo real para ti, quizás seamos solo una consecuencia,
o tal vez la casualidad no existe y el destino trabaja para mí por minutos.

S O L O sé que me siento más S O L O sin ti,
sin saber que estas pensando en mi, en que estaré haciendo,
las almas gemelas, los espíritus similares, los entes eternos;
una moneda lanzada por un niño, cara o sello para saber si te amo o me odias,
somos literas que esta separadas por el tiempo diminuto entre los siglos.